La desaceleración de la economía china ha alcanzado tal nivel que ha llevado al Banco Central chino a decidir bajar los tipos de interés con el objetivo de estimular la recuperación económica. Esta desaceleración se refleja tanto en las importaciones (que se desaceleran globalmente en comparación con años anteriores) como en el consumo interno.
CARNE DE CERDO. Tomemos el caso del sector porcino: la debilidad de la demanda y el exceso de oferta han provocado una caída de las cantidades importadas, que en el primer semestre de 2024 son más de una cuarta parte inferior (-27%) en comparación con el primer semestre de 2023. En términos de valor, la caída ha sido aún más significativa: -40,8%, lo que ha reducido las importaciones a poco más de 2.200 millones de dólares.
Un mercado marcado por la atonía del consumo ha provocado una caída de la producción nacional de carne de cerdo, provocada por la reducción del número de madres. Este escenario estimuló una recuperación de los precios en junio, tanto del porcino (+10,4%) como de la carne de cerdo (+10,9%) respecto al mes anterior.
MATERIAS PRIMAS. Centrándonos en las materias primas, el dimensionamiento de los cerdos en China ha provocado una reducción de la demanda de piensos. En consecuencia, el consumo de soja y maíz en el país se ha desacelerado. El mercado de la soja y sus derivados se caracteriza por una gran disponibilidad de productos en comparación con la demanda, debido también a las importantes cantidades importadas (48,4 millones de toneladas en el primer semestre de 2024).
En los próximos meses, la demanda china en los mercados internacionales podría debilitarse y absorber menos producto (la reducción de la importación desde EE. UU. ya es clara para las oleaginosas, dado el -37,9% para el primer semestre de 2024 en comparación con el mismo período de 2023) provocando un efecto bajista en los precios.
También el mercado del maíz, actualmente, se caracteriza por la oferta que compensa la demanda, lo que llevó a una reducción de los precios locales en los últimos 12 meses y a una reducción de las importaciones.
LECHERÍA. La demanda en el sector lácteo también es débil. La oferta local está aumentando, respaldada por las inversiones industriales, mientras que los precios a productor llevan meses con una tendencia a la baja, alcanzando una diferencia del -22,5% entre junio de 2022 y enero de 2024.
El panorama general muestra una tendencia negativa continua de las importaciones: en el primer semestre, las importaciones chinas de productos lácteos disminuyeron en general un -16% en comparación con el mismo período de 2023, con disminuciones principalmente para leche fluida y en polvo.
Fuente: Información CLAL