Buscando mejores alternativas de alimentos, seguramente te has topado con la leche fortificada sin saber claramente qué es o por qué puede ser más cara que otras. Se trata de un producto lácteo que se enriquece con distintos nutrientes con la intención de que, quien la consuma, obtenga mayores beneficios en su cuerpo.
Esta variante tiene varias condiciones y aquello que se le agrega no siempre se absorbe de manera correcta. Esto sucede por procesos específicos de cada organismo y en realidad es una manera de agregar suplementos alimenticios a un ingrediente, por lo que primero es importante saber qué necesitamos y después valorar si nos servirá o no.
Todo aquello que vaya dentro de un Brik y su etiqueta lo denomine leche, debe tener los componentes que asegurarán que lo que bebas tenga la cantidad propia de calcio, yodo, fósforo, vitaminas A, B12 y riboflavina; además de tener un aportar de curiosidades que vale la pena conocer.
Por simples cuestiones de naturaleza, es imposible que la leche tenga nutrientes como el omega-3 o vitamina D; sin embargo, estos dos son tan solo algunos ejemplos de los suplementos alimenticios recomendados para el crecimiento y desarrollo de niños, así como el buen funcionamiento de un cuerpo adulto.
La leche de vaca es el alimento más consumido por niños en todo el mundo y esto lo hace el mejor vehículo para llenarlos de nutrientes que necesitan, a pesar de que no los tenga.
Se creó un método de fortificación, que quiere decir que se agregan estas sustancias en estado puro con la intención de integrarlo. A pesar de que suena solo como incorporar ingredientes a la mezcla, hacer una leche fortificada tiene su chiste.
En primer lugar, se debe estudiar que las cantidades del nutriente adicionado sean adecuadas, es decir, no presenten una concentración excesiva que pueda generar problemas a largo plazo, ni tan reducida como para no suponer una mejora significativa.
El siguiente paso es tratar de optimizar al máximo los índices de absorción, ya sea adicionando promotores de absorción o eliminando o disminuyendo la presencia de inhibidores. Por ejemplo, la vitamina C o ácido ascórbico es promotor en la absorción del hierro, mientras que los fosfatos son inhibidores.
¿CONVIENE O NO TOMAR LECHE FORTIFICADA?
Sí conviene, siempre y cuando tengas claro para qué la tomas y qué quieres obtener de ella. Si la respuesta es genérica -algo como para mejorar la salud- lamentamos decirte que no verás resultados palpables y quizás subas de peso y tires tu dinero a la basura.
Recuerda: la leche fortificada fue creada para el correcto desarrollo y nutrición de niños -aunque ya también existen variedades para mujeres embarazadas y personas de la tercera edad- así que si necesitas complementar tu alimentación con vitaminas y minerales, lo mejor será que consultes un experto para hacerlo de forma correcta.
Fuente: https://www.animalgourmet.com/