Un estudio comparativo de 181 bebidas vegetales a base de soja, avena, arroz o almendra realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) defiende el escaso aporte nutricional de este tipo de bebidas frente a la leche, incluso en caso de ser comparadas con la leche semidesnatada. Todas las marcas analizadas están a la venta en supermercados.
Según el análisis, el agua supone de media el 90% de contenido de las bebidas vegetales. “En algún caso, hasta el 98% del contenido es solo agua, sobre todo en las bebidas a base de almendras; las únicas, por cierto, que pueden usar la palabra leche en su nombre”, afirma el texto de la OCU.
El siguiente ingrediente más frecuente en la composición es el que define cada bebida vegetal, es decir, soja, avena, arroz o almendra. En relación a lo observado por la organización, la “gran mayoría” de las 181 bebidas vegetales analizadas incorporan pequeñas cantidades de sal, azúcar, aceites vegetales, vitaminas, calcios y, en algunos casos, también aromas y aditivos.
“No aconsejamos las bebidas con aromas, aunque sean de origen natural, pues son el sustituto de este ingrediente cuyo olor imitan. Tampoco recomendamos los productos con edulcorantes, ciertos espesantes como la goma de celulosa o E-466 y estabilizantes como la carboximetilcelulosa o E-469. Tampoco son favorables los fosfatos E-340, E-341 y E-352 que se incorporan como correctores de acidez. Estos últimos no suelen ser habituales en este tipo de bebidas”, explican de la OCU.
El estudio comparativo determina que el aporte nutricional de las bebidas vegetales “es limitado”. Estos productos “no sirven como sustitutos de la leche de vaca, ya que el calcio añadido tampoco se asimila igual; son bebidas que pueden hidratarnos, como podría hacerlo un zumo”, tal y como explica la OCU en su estudio, publicado en el número de junio de su revista, dedicado a la salud.
Entre los múltiples tipos de bebidas vegetales analizados por la Organización de Consumidores y Usuarios, las más recomendables para el consumo son aquellas elaboradas con soja. Según los resultados obtenidos, las valoraciones sobre estos productos son superiores gracias a su mayor aporte en proteínas. Sin embargo, la presencia en isoflavonas hace que este tipo de alimento esté desaconsejado para consumir por bebés, adolescentes, niños y mujeres embarazadas.
Además, el análisis de la OCU ha desvelado que la amplia mayoría de las 181 bebidas vegetales seleccionadas incorporan una media de azúcar del 4,4% del contenido total, cifra que baja hasta el 3,5% en aquellas bebidas que son sin azúcares. En algunos casos, esta cantidad supone el equivalente a 18 gramos de este edulcorante, es decir, unos cinco terrones de azúcar. La organización indica que es “especialmente” acusado en aquellos productos con sabores, como los de chocolate.
Fuente: Mundo lácteo