Para muchas personas, el desayuno es la comida que más disfrutan en el día. Una leche con café o chocolate, un bowl de yogur con frutas o unas tostadas con queso dan la suficiente energía para enfrentarse a la jornada que apenas empieza.
“La leche y los productos lácteos constituyen un grupo de alimento muy completo y equilibrado. Tienen un elevado contenido de nutrientes en relación con su contenido calórico y aportan proteínas de alto valor biológico, hidratos de carbono, grasas, vitaminas liposolubles e hidrosolubles, minerales como calcio y fósforo”, señala la especialista en Nutrición y Dietética, Paola Auhing.
Pese a ello, hay un porcentaje de la población que esta combinación de alimentos en lugar de proveerle satisfacción y fuerzas para comenzar el día le otorgan todo lo contrario. Ellos son los intolerantes a la lactosa, un cuadro clínico en el que el paciente no fabrica suficiente de una enzima conocida como lactasa, por lo que se le dificulta digerir bien los lácteos.
El pan, galletas, pasteles, cereales, sopas, proteínas en polvo, varios alimentos procesados y hasta algunos medicamentos pueden contener una pequeña cantidad de lactosa que le provoque gases, diarrea y distensión abdominal.
El único tratamiento para este mal de origen genético, que no tiene cura conocida, era dejar de comer productos lácteos. Sin embargo, gracias a los avances tecnológicos, ahora hay una amplia gama de productos deslactosados disponibles en el mercado que brindan iguales nutrientes que los productos lácteos regulares, lo que permite a los consumidores disfrutar del mismo sabor en sus platos favoritos.
“Estos alimentos han pasado por un proceso de elaboración en el que se les agrega enzimas que rompen las moléculas de lactosa y permite que esta sea digerida. Tal como haría el aparato digestivo de las personas que la toleran y pueda ser absorbida por el intestino de los intolerantes”, explica la nutricionista Auhing, quien ha trabajado en proyectos con Industrias Lácteas Toni S.A.
Del mismo modo, la asesora médica señala que otro de los mecanismos es quitar la lactosa del producto y agregar azúcar, por lo que hay leches deslactosadas que presentan un sabor mucho más dulce.
En la compañía, que es la primera planta procesadora de yogur industrial en el Ecuador, se ofrecen gran variedad de productos deslactosados ricos en calcio, vitamina K y vitamina D3.
Sus beneficios
- Se digiere mejor, debido a que al añadirle la lactasa se le facilita el trabajo al intestino pudiendo metabolizarla de forma más rápida.
- Ayuda a la absorción del calcio y otros nutrientes fundamentales que contiene la leche
- Tiene los mismos componentes que la leche no modificada.
Fuente: https://www.expreso.ec/buenavida/salud/productos-deslactosados-solucion-intolerancia-135383.html