El índice de precios de los productos lácteos de la FAO registró un promedio de 132,1 puntos en enero, esto es, un alza de 3,1 puntos (un 2,4 %) desde diciembre de 2021, lo que representa el quinto aumento mensual consecutivo y hace que el índice se ubique 20,8 puntos (un 18,7 %) por encima del valor registrado en el mismo mes del año pasado.
En enero subieron las cotizaciones de los productos lácteos; las subidas más pronunciadas correspondieron a la leche descremada en polvo y la mantequilla. El aumento de enero se debió a la disminución de la oferta en los mercados mundiales a consecuencia de una reducción de las disponibilidades exportables, especialmente en Europa occidental, donde la reducción de las entregas de leche de algunos de los grandes países productores de leche y una caída de las reservas empujaron los precios al alza.
Las expectativas de que la producción de leche en Oceanía en los próximos meses se mantenga en un nivel inferior al promedio contribuyeron a la contracción de los mercados mundiales de productos lácteos. Además, las demoras en la elaboración y el transporte de la leche provocadas por la escasez de mano de obra relacionada con la enfermedad por coronavirus (COVID-19) hicieron que los precios de los productos lácteos subieran todavía más.
Por su parte, el índice de precios de la carne de la FAO* se situó en enero en un promedio de 112,6 puntos, ligeramente superior al de diciembre de 2021, lo que empujó el índice 16,6 puntos (un 17,3 %) por encima del valor registrado en el mismo mes hace un año.
En enero los precios de la carne de bovino alcanzaron un nuevo máximo, respaldados por una fuerte demanda mundial de importaciones que superó a los suministros para la exportación, principalmente en el Brasil y Oceanía, a raíz de una disminución de la oferta de ganado destinado a la elaboración.
Por su parte, las cotizaciones de la carne de cerdo subieron ligeramente, ya que la escasez de mano de obra y los elevados costos de los insumos redujeron la oferta mundial, contrarrestando la presión a la baja ejercida por la desaceleración de las importaciones en China.
Por el contrario, los precios de las carnes de ovino y aves de corral siguieron descendiendo, ya que los suministros exportables a escala mundial superaron a la demanda de importación, pese a las limitaciones de la oferta derivadas de las demoras en la producción y el transporte relacionadas con la COVID-19 y, en algunos de los grandes países productores de carnes de aves de corral, de brotes de gripe aviar.
El índice de precios de los alimentos de la FAO repunta en enero
El índice de precios de los alimentos de la FAO* registró un promedio de 135,7 puntos en enero de 2022, es decir, 1,5 puntos (un 1,1 %) más que en diciembre de 2021. El repunte del índice en enero obedeció a aumentos considerables en los subíndices de los aceites vegetales y los productos lácteos, que se vieron compensados en parte por una disminución de los precios del azúcar por segundo mes consecutivo. Los subíndices de la carne y los cereales no experimentaron prácticamente variaciones.
Fuente: https://www.fao.org/