En entrevista con diario La Tribuna, Juan Pablo Aruta, presidente de la Asociación de Productores de Leche de Bío Bío (Aproleche Bío Bío A.G.) dijo que “los poderes de compra de la industria en la región se han mantenido estables, con baja competencia. No obstante, lo que sí genera preocupación, es el alza exagerada en los insumos para producir leche de calidad, que no ha venido acompañado con un aumento del precio de esta en la misma medida”.
Además, hay una baja en la cantidad de productores. Si bien la productividad de cada uno ha aumentado, el dirigente del gremio ve con preocupación la salida del sistema de los lecheros más pequeños. “En Biobío había un universo grande de productores, que se ha perdido con el tiempo”. Muchos pequeños productores –remarcó- se han alejado del negocio ganadero-lechero, volcándose hacia la producción agrícola de cultivos tradicionales más rentables.
En Chile hay un déficit de producción de leche, que se ha suplido con la importación de productos lácteos extranjeros. Ante esto, Aruta está de acuerdo con la apertura comercial de Chile, pero cree que las condiciones comerciales de la industria lechera interna no ayudan a los productores locales, que se ven presionados por la oferta internacional que entra al país. “La industria pierde competitividad y hoy es posible encontrar leche producida en España o Alemania. Y estos productos, además, muchas veces no cuentan con la calidad de los productos lácteos chilenos”.
Otro de los flancos desde donde se ha atacado a la industria ganadera, es el de la producción de gases de efecto invernadero, con los que la producción lechera contribuiría al calentamiento global. Sin embargo, el presidente de Aproleche Bio-Bio no coincide con la crítica ambiental que se le ha venido haciendo desde hace un tiempo a este sector productivo.
“Hasta ahora son apreciaciones de personas de sectores con intereses distintos a la producción de alimentos para la población, mientras no se comprueben los dichos, debe considerarse como información falsa”.
El dirigente gremial remarca que la leche debe seguir apostando por posi-cionarse como el alimento de buena calidad y sano que le ha permitido a Chile llegar a la producción que se tiene actualmente. “Es importante mantener la leche dentro de la dieta chilena, para mantener también la salud en estos tiempos de pandemia”.
Si bien la industria y los productores han tenido diferencias históricas en sus puntos de vista, Aruta señaló que en este minuto deben trabajar más unidos que nunca “para enfrentar el alza desmesurada de los precios de los insumos y evitar el cierre de más lecherías por los efectos generados por estas alzas, que podrían ser circunstanciales”.
MERCADO NACIONAL DE LA LECHE
La región del Biobío concentra el 6,2% de la producción de leche a nivel nacional, con alrededor de 142 millones de litros producidos durante el año 2020. Y la mayor parte de esta producción se concentra en la comuna de Los Ángeles. La producción nacional de leche se estima en 2.500 millones de litros anuales y abastece aproximada-mente al 82% del consu-mo nacional, que hoy es de aproximadamente 160 litros de leche por habitan-te al año. Dicha cifra representa poco más de la mitad del consumo en los países europeos, que se acerca a casi los 300 litros por habitante al año.
Esta fue una de las estimaciones que el gerente de la Federación Nacional de Productores de Leche –Fedeleche, Carlos Arancibia, comunicaba el 8 de julio en un conversatorio organizado por Prochile, institución del Ministerio de Relaciones Exteriores que promueve la oferta de bienes y servicios chilenos en el mundo. De hecho, el vocero de la federación mencionó en dicha instancia, que el país puede producir mucho más que esa cifra. La actual situación del sector lácteo nacional cuenta con la potencialidad de aumentar la oferta interna, así como el comercio exterior de lácteos.
De acuerdo a Arancibia, la eficiencia y la escala del sector lechero ha permitido aumentar la producción de leche a nivel nacional, a pesar de la disminución en el número de productores. Y con el fin de mantener esta positividad dentro del sector lechero, es que la federación se encuentra trabajando en distintas iniciativas, las que apuntan a aumentar la producción de leche en Chile. Sin embargo, los gremios del sector creen que aún hay materias que se deben tratar para darle mejores condiciones para su desarrollo.
Entre estas tareas se encuentra recuperar el autoabastecimiento a nivel país, lo que implica sustituir la importación de lácteos y aumentar las exportaciones de leche y productos derivados de esta. En Chile aún se importan más lácteos de los que se exportan. Una de las principales tareas planteadas por el ejecutivo de la federación gremial fue aumentar las exportaciones de lácteos “Premium”, a través de la marca Chile Milk.
Además, hoy los estándares de sustentabilidad, calidad y confiabilidad de los productos hechos con leche en el país les da a los productores de la zona mayor confiabilidad respecto a la industria lechera. Sin embargo, según datos entregados por Odepa (Oficina de Estudios y Políticas Agrarias del Gobierno de Chile), las importaciones lácteas a Chile anotaron un alza de 47,2% a mayo de 2021 respecto al mismo mes del año anterior.
De acuerdo a datos entregados por la Federación Nacional de Productores de Leche este año, el 61% de los productos lácteos que se importan a Chile son los quesos, que vieron un incremento en su participación de más del 60 por ciento en comparación con el año pasado. Las compras de productos lácteos chilenos en el extranjero durante mayo de este año sumaron 66,7 millones de dólares adicionales con relación al mismo periodo del año anterior y fueron impulsa-das principalmente por los quesos y las mantequillas.
De acuerdo a datos de Fedeleche, Chile exporta el 15% de la producción nacional de leche y el mercado nacional aún cuenta con perspectivas de mayor desarrollo e impulso productivo que no se han explotado.
Fuente: https://diario.latribuna.cl/